atmosférica y una temperatura global permanente que sobrepasaba
los 400º centígrados. Años después, su hipótesis
sería confirmada por las observaciones de las sondas Venera, Mariner,
Pionner Venus, Vega y Magallanes.
En junio de 1957 se casó con la estudiante Lynn
Alexander, una bióloga que esbozó una polémica
teoría sobre la evolución de la vida en la Tierra. Se divorció
de Lynn (luego Alexander Margulies) en 1963. De éste, su primer
matrimonio, nacieron sus hijos Dorion y Jeremy. Desde 1962 hasta 1968
trabajó como Astrofísico en el Observatorio Astrofísico
Smithsoniano y tuvo tiempo de estudiar los orígenes de los organismos
con los genetistas Hermann J. Muller (Premio
Nobel) y Joshua Lederberg, sentando las bases
de la exobiología o astrobiología.
EL ACADÉMICO TRANSGRESOR
Su activa participación en el proyecto Mariner 4 de la NASA -la
primera sonda que llegó a Marte, en junio de 1965- coincidió
con su desenvuelta inserción en el escenario académico
y sus primeras apariciones públicas. Sagan encarnaba el modelo
del joven científico y audaz, dispuesto a desafiar lo establecido.
Profesor ayudante de astronomía en la Universidad de Harvard y
astrofísico en el Observatorio Astrofísico Smithsoniano
(1962-1968), por entonces participó con el científico soviético
I. S. Shklovski en un histórico encuentro sobre búsqueda
de vida extraterrestre. Estas actividades lo convirtieron en un pionero
de la cooperación científica con la ex URSS en tiempos de
la guerra fría. Hay una anécdota que refleja bien su fama
de científico independiente, imprevisible y heterodoxo: cuando
en los 80 el ex primer ministro soviético Mijail
Gorbachov le propuso a Ronald Reagan
planificar una misión conjunta a Marte, el presidente norteamericano
desechó enseguida la idea cuando se le informó que Sagan
era el patrocinador de la idea.
Ya sea por su proximidad con los científicos de la ex URSS como
por su interés por la vida extraterrestre (por ejemplo el que mostró
en la recopilación OVNIS: Un Debate Científico,
1972), las iniciativas que Sagan organizaba en Harvard no eran vistas
con simpatía por las autoridades de la Universidad, que decidieron
no renovarle el contrato. Así, emigró a la Universidad de
Cornell en Ithaca, Nueva York, con Linda Salzmann, su nueva esposa desde
1968. Allí, junto con su colega Frank Drake
desarrolló la fórmula para calcular el número de
civilizaciones tecnológicas existentes en nuestra galaxia con las
cuales podríamos establecer comunicación.
Posteriormente, ejerció como profesor en la cátedra David
Duncan de Astronomía y fue director del Laboratorio de Ciencias
Planetarias en la Universidad de Cornell. Allí realizó varios
experimentos centrados en el origen de la vida. En uno de ellos,
por ejemplo, confirmó que las moléculas orgánicas
base de la vida pueden reproducirse en laboratorio bajo condiciones controladas.
Consultor permanente de la NASA desde los años 50 y científico
invitado en el Jet Propulsion Laboratory [Laboratorio de Propulsión
a Reacción] del Instituto de Tecnología de California, tuvo
un activo papel en el proyecto Apolo 11 como instructor de los astronautas
y en la misión Mariner 9 a Marte, que pasó a la historia
al determinar que el Planeta Rojo alguna vez fue activo y acaso pudo albergar
vida. Tambien formó parte de los proyectos Pioneer, Viking, Galileo
y Voyager. Sagan fue quien tuvo la polémica idea de incluir
un disco de oro con información sobre la vida en la Tierra en las
sondas Pionner y Voyager, las que, al completar sus respectivas misiones
en los confines del Sistema Solar, saldrían disparadas hacia el
espacio profundo. Algunos acusaron a sus contenidos por su chauvinismo
cósmico (1). Aún así, sus iniciativas
se convirtieron en la primeras arcas de Noé despachadas
al espacio exterior.
SAGAN MULTIFACÉTICO
También fue un activo militante a favor del desarme y por la causa
de la paz, llegando a ser detenido durante una manifestación
frente al Capitolio. Agudo crítico de los deterioros que causarían
una guerra nuclear, criticó duramente los intentos suicidas por
producir armamento nuclear por parte de las grandes potencias. También
se opuso firmemente al desarrollo de defensas nucleares ante el
eventual impacto de un asteroides: las propias armas atómicas,
insistía Sagan, son más peligrosas que los asteroides.
Sagan fue el ángel cupido que enamoró a millones de lectores
y televidentes con la ciencia. El fascinante estilo con que explicaba
las cosas más complicadas, convertía a cada tema que abordaba
en oro: la exploración planetaria, la vida extraterrestre, la educación
científica, la preservación del ambiente y la política...
Su talento para divulgar la ciencia -tarea en la que priorizaba encender
la chispa de la curiosidad antes que difundir meros conocimientos- fue
una de sus mayores virtudes, junto con la de predicar con el ejemplo
que el pensamiento crítico debe ser una actitud que no empieza
y termina en aquellas cuestiones relacionadas con la ciencia sino que
debe abarcar todos los aspectos de la vida. En esa línea
instó a los científicos no aliarse a los intereses políticos:
Si no podemos pensar por nosotros mismos, si somos incapaces de
cuestionar la autoridad, somos pura masilla en manos de los que ejercen
el poder, escribió.
Columnista científico en centenares de diarios y revistas, sus
principales obras estuvieron consagradas a popularizar la ciencia. "Los
Dragones del Edén" (1978), uno de sus primeros libros, recibió
el Premio Pulitzer. Un año después contagiaría masivamente
su entusiasmo por la ciencia a través de la serie televisiva Cosmos,
ganadora de tres premios Emmy y un Peabody. Pero su principal mérito
no fueron los premios sino haber hecho entrar la cosmología, la
historia de la ciencia y la astronomía a más de 500 millones
de hogares, convirtiendo a los 13 capítulos de aquel programa
en el intento por divulgar la ciencia más exitoso de la televisión
mundial. El libro del mismo título batió récords
de venta y sigue siendo el más vendido del género en inglés.
Luego escribió Contacto, su novela-manifiesto, donde
presentó un escenario posible de contacto con inteligencias extraterrestres
y reflejó sus preocupaciones de toda la vida respecto de la compleja
trama de relaciones entre ciencia y religión. Llevada al cine en
1997, Sagan se esforzó para que sus especulaciones, más
que parecer realistas, fueran teóricamente posibles, para lo
cual consultó a los más notables científicos de cada
área. La novela derivó en hallazgos posteriores: Kip
S. Thorne, un destacado físico teórico, perfeccionó
su teoría sobre los agujeros de gusano tratando de averiguar si
era científicamente posible que Elleanor
Arroway -la exobióloga que protagoniza la novela- viajara
más rápido que la velocidad de la luz.
En El Universo de Carl Sagan (Cambrigde University Press,
Madrid, 1999), un libro que recoge las conferencias que sus colegas y
amigos le dedicaron al cumplir sesenta años y editado tras su fallecimiento,
Bill Murray destacó: "Carl Sagan fue el padre del tema de
la vida en Marte. Es que su brillante intelecto, su capacidad para
transmitir con fluidez sus ideas y su intensa personalidad le permitieron
influir sobre los demás e imponer agendas de temas
en el tiempo y el lugar donde vivió.
SAGAN, EL ACTIVISTA
Fue cofundador y presidente durante doce años de la Sociedad
Planetaria, la organización más importante del mundo
dedicada a temas espaciales, con más de 100 mil miembros en todo
el mundo. También, fue responsable de la prestigiosa revista Icarus
y líder del Proyecto SETI (Búsqueda
de inteligencia extraterrestre). En 1976, cofundó con otras personalidades
el Comité Para la Investigación de
Presuntos Fenómenos Paranormales (CISCOP). También
cuestionó las seudociencias y la religión en El
cerebro de broca (1979) y "El
mundo y sus demonios (1996). Una frase de ésta, su obra
póstuma, rescata el espíritu que lo guió toda vez
que abordó estos temas: Si no podemos pensar por nosotros
mismos, si somos incapaces de cuestionar la autoridad, somos pura masilla
en manos de los que ejercen el poder.
A lo largo de su vida recibió tantas distinciones que es imposible
enumerarlas a todas. Recibió la medalla Oersted, el premio John
F. Kennedy de la Sociedad Astronáutica Americana, el premio
del 75 aniversario de Explorers Club, la medalla Konstantin
Tsiolkovsky y Soviética y el premio Masursky de la Sociedad
Astronómica Americana y 22 títulos honorarios de diferentes
universidades norteamericanas. Un asteroide, el 2709, fue bautizado con
su nombre y cuando en 1994 la Academia Nacional de Ciencias le concedió
el premio más importante, la medalla pública Bienestar Público,
la entidad expresó: Nadie nunca consiguió transmitir
las maravillas ni el carácter estimulante y jubiloso de la ciencia
con tanta amplitud como lo ha hecho Carl Sagan
Nadie mejor
que él encarnón en el siglo XX el espíritu ecléctico
del Renacimiento: sus contribuciones abarcaron la ciencia, la literatura,
la educación y la conservación ambiental.
Divorciado de Salzmann en 1982, el 1° de junio de ese mismo año
se casó con
Ann Druyan, quien lo acompañó hasta sus últimos
días. Cuando se le diagnosticó una enfermedad llamada mielodisplasia,
un síndrome preleucémico, Sagan fue sometido en tres ocasiones
a transplante de médula ósea y quimioterapia. Falleció
en Seattle, a causa de una neumonía, en la madrugada del 20 de
diciembre de 1996. Tenía 62 años.
Nota:
1) CHAUVINISMO CÓSMICO EXPLICADO: Algunos críticos
acusaron a la NASA de ingenua (la placa de las Pionner el
hombre mostraba la palma de su mano en gesto de bienvenida, como si un
ET no pudiera interpretar precisamente lo opuesto) y otros de hipocresía:
los discos de la Voyager, ciertamente, ocultaron no sin engañoso
pudor aspectos non-sanctos de nuestra inmaculada civilización
occidental y cristiana...
Bibliografía consultada:
Sagan, Carl. "Los dragones del Edén: Especulaciones sobre
la evolución de la inteligencia humana". Ed. Grijalbo-Mondadori.
Col. Crítica. Barcelona, 1993.]
Sagan, Carl [1995]: "El mundo y sus demonios. La ciencia como una
luz en la oscuridad". Editorial Planeta, Buenos Aires, 1997.
Sagan, Carl. "Miles de millones: Pensamientos de vida y muerte en
la antesala del milenio". Ediciones B (Col. SineQuaNon). Barcelona
1998.
Terzian, Yervant; y Bilson, Elizabeth (Eds.); "El Universo de Carl
Sagan" [Carl Sagan's Universe, Cambrigde University Press, 1997].
Trad. de Dulcinea Otero Piñeiro y David Galadí-Enríquez.
Madrid 1999. 336 páginas.
Camejo Marco Antonio, Biografía de Carl Sagan En http://almaak.tripod.com/biograph/Carl_Sagan.htm
NOTAS RELACIONADAS:
Bibliografía Básica.
Fragmento de El mundo y
sus demonios
BIOGRAFÍAS RELACIONADAS:
Mijail Gorbachov
Ronald Reagan
Frank Drake
Kip S. Thorne
John F. Kennedy
Konstantin Tsiolkovsky
Ann Druyan
ENLACES RELACIONADOS:
Sociedad Planetaria
SETI (Búsqueda de inteligencia extraterrestre)
CSICOP (Comité Para la Investigación de Presuntos Fenómenos
Paranormales)
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