Este es el relato de un episodio sobre el cual nunca
hubiera querido escribir. Muestra cómo los escépticos
no son inmunes al engaño y enfatiza la importancia de la
prevención para que no se repitan hechos como este en las
organizaciones escépticas.
El 15 de noviembre de 2001, el ufólogo argentino
Francisco Fazio fue invitado al programa
televisivo “Movete”. Ahí presentó un video donde
se podía ver a un
OVNI volando cerca de las Torres Gemelas (supuestamente el
24 de julio de 2000) (1). El video había sido originalmente
emitido al aire hacía más de un año, como
clip promocional (2).
Al día siguiente, el 16 de noviembre de 2001, Christian
Sanz, presidente de la organización escéptica
ASALUP (3) apareció en el mismo programa para mostrar la
otra cara de la moneda. El ufólogo Fazio también
estuvo allí y ambos tuvieron un áspero debate. Sanz
-mientras los televidentes miraban el video- leyó lo siguiente:
“Este video fue creado por Edefex S.A. (4) para
una cadena de televisión que se llama Sci Fi. No sólo
lo hicieron, sino que ahora salieron a admitir que lo hicieron
porque Sci Fi estaba teniendo poca audiencia y quisieron hacer
una broma como la de Orson Wells.
No sólo lo hicieron sino que explican cómo lo hicieron.
[...] Este video fue defenestrado píxel por píxel.
Esto fue admitido por una compañía llamada
Edefex.”
Esta era la primera vez que Sanz mencionaba a la
compañía Edefex. La siguiente fue el 17 de noviembre
de 2001, un día después del debate con Fazio, cuando
publicó un artículo titulado “El Ovni que no fue”
en la página web de ASALUP
(www.asalup.org)
LA SOLICITUD PRIVADA
Este artículo llamó la atención del periodista
Alejandro Agostinelli,
quien quería saber sobre la fuente mencionada por Sanz.
No había señales de la compañía Edefex
en internet. Lo único que pudo encontrar fue una breve
mención, del año 1995, en una página brasileña,
como “The Edefex Group USA”. El periodista, que en ese momento
estaba produciendo un especial de TV, envió un e-mail al
Sci Fi Channel, donde obtuvo una respuesta automática.
Un productor que vivía en Los Angeles también llamó
al Sci Fi y nadie le contestó cuando preguntó sobre
la autoría del video de las Torres. De ahí en adelante,
Agostinelli le insistió a Sanz en reiteradas ocasiones.
Sanz le respondió que había obtenido la información
de una página mexicana, lo cual había sido
confirmado -siempre según Sanz- vía
fax por un “técnico” que trabajó para el Sci Fi.
Sanz dijo que estaba enviando los “papeles”, pero nunca apareció
nada.
Así que, el 29 de enero de 2002, Agostinelli le escribió
nuevamente a Sanz preguntándole por alguna fuente en la
cual pudiera chequear la existencia de tal compañía.
Sanz le contestó que el documento (que probaba que Edefex
era la responsable de los efectos especiales que se veían
en el video del Sci Fi) se le había traspapelado. En una
mudanza, el documento había desaparecido:
“Yo nunca busqué en Internet la empresa Edefex
y solo confié en un papel que me envió un mexicano
que tiene un logo que podría haber sido hecho por cualquier
persona que tenga un programa de gráficos. Me pone mal
porque tal vez haya caído en una imbecil trampa y lo más
triste es que no chequee la info por el apuro de hacer la nota.
Creeme que soy muy exhaustivo a la hora de buscar las fuentes
que respalden mis afirmaciones. Calculo que voy a poner
una nota en la página aclarando lo sucedido y a partir
de ahora no haré más tamaña imbecilidad.”
Agostinelli, quien conocía la confiabilidad
y seriedad de las revistas que habían publicado el artículo,
le aconsejó a Sanz que escribiera una nota aclaratoria
sobre la cuestión. Cuando Agostinelli le preguntó
a Sanz, unas pocas horas después, quién era el mexicano
que le había tendido esa “estúpida trampa”, Sanz
contestó:
“El tipo en cuestión se llama Hugo Giménez
Moreno y es mexicano. No me carteo demasiado, solo dos veces.
Respecto a la aclaración, estaba trabajando justamente
en eso.”
Adviértase que él dijo que había
intercambiado correspondencia con un mexicano llamado Hugo Giménez
Moreno. En otro e-mail que Sanz envió a la lista interna
de ASALUP, decía que todo había sido manejado
por correo convencional. No quedaba claro qué
había pasado, principalmente porque Sanz parecía
tener una respuesta diferente para cada persona.
Diez meses después, a fines de septiembre
de 2002, no había nota, aclaración o respuesta alguna.
Agostinelli había solicitado y esperado la información
durante más de diez meses. No sólo
no recibió respuesta, sino que hizo un descubrimiento sorprendente:
en la página mexicana X-Files México (que
ya no está en línea) había un artículo
de Arturo Lugo y
César Buenrostro con
párrafos enteros idénticos a los del artículo
de Sanz (5). Y algo más: Sanz no mencionaba
ninguna fuente y no citaba a ningún autor. El
artículo publicado por ASALUP estaba firmado por Sanz como
si fuera propio. Sin embargo, parecía un plagio. Y ese
plagio citaba a una compañía de dudosa existencia.
Poco después, el Lic. Carlos Domínguez
nos informaba a Agostinelli y a mí sobre otro plagio realizado
por Sanz. Se trataba de un artículo anterior sobre las
hermanas Fox, “La Casa de los Espíritus” que había
sido publicado en el boletín Nro. 12 del CAIRP (Enero-Febrero
de 2001), firmado por Sanz (6). El artículo original pertenecía
a Claudio Trivisonno y su título
era “Charlando con Elvis. Una explicación cientifica del
espiritismo”. Sanz agregó un párrafo al principio
y otro al final, y puso todo el artículo a su nombre.
COMIENZAN LAS SOLICITUDES PÚBLICAS
Agostinelli
y yo decidimos que habíamos llegado a un punto en donde
teníamos que hacer pública esta cuestión.
Habían pasado más de diez meses sin respuesta ni
aclaración.
Así que, el 9 de octubre de 2002, envié un mensaje
a la lista “Incrédulos”, que pertenece a ASALUP y cuyo
administrador es Sebastián Bassi,
diciendo que había observado estas irregularidades y pidiendo
una aclaración sobre el asunto. Contestaron que no
había evidencia respecto de que Sanz hubiera plagiado el
artículo mexicano, y que la cita de Edefex podría
ser un error.
Resulta muy extraño mantener un “error” on-line durante
10 meses, sobre todo cuando el propio “autor”, presidente de la
asociación, había sido notificado del mismo
y había dicho que iba a corregirlo.
ASALUP retiró el artículo de la página web,
diciendo que estaba “en revisión”. De modo que -si alguien
quería chequear que lo que nosotros decíamos era
cierto-, no podía hacerlo. Sacaron la evidencia del plagio
y la dudosa cita de Edefex. Con respecto a los párrafos
del artículo de Sanz, el 40 por ciento era una
copia exacta del artículo de la página mexicana
“X-Files Mexico” (7).
Sin embargo, el 9 de octubre de 2002, en un mensaje enviado a
la lista “Incrédulos”, Sanz decía:
“... Lo que yo le dije a Agostinelli es que me diera
tiempo para mostrarle un fax enviado por los 1º investigadores
del tema..”
Hasta ese e-mail, Sanz nunca había hablado
acerca de un fax en una lista pública. Había mencionado
un “documento”, un “papel”, pero no un fax. También
se refirió a un fax en la lista interna de ASALUP (asalup-int)
el 7 de octubre de 2002:
“Les escribí a los tipos preguntando acerca
de varios puntos, entre ellos el tema Edefex y me contestaron
en seguida. En el mail me preguntan si tengo máquina de
fax. Les dije que sí [...] y me enviaron lo que ellos tenían.
Ese papel fue mostrado al día siguiente en el programa
de Carmen Barbieri”.
Pero realmente la primera vez que Sanz mencionó
un fax fue en un e-mail privado enviado a Agostinelli el 2 de
enero de 2002:
“La información sobre Edefex la saqué
de una página sobre Ufología de México y
me confirmó la info por fax un técnico que trabajó
para Sci Fi. Busco los papeles y te los hago llegar”
De ahí en más comenzó a hablar
de “documento”, “papel”, pero no de un “fax” hasta el 7 de octubre
de 2002, diez meses después. Si ya le había dicho
a Agostinelli que la información había sido confirmada
por fax... ¿por qué al mismo tiempo aludía
a una “correspondencia” con un mexicano? ¿Por
qué no siguió todo el tiempo hablando de un fax?
Sanz también mencionó a un “técnico”
que había trabajado para el Sci Fi Channel. Pero en el
primer e-mail mencionado aquí, dio el nombre de "Hugo
Giménez Moreno". Y diez meses después mencionaba
a Arturo Lugo. Hasta ahora, los miembros de ASALUP continúan
diciendo que Lugo fue quien envió el fax. Pero Lugo desapareció.
Sanz alternaba todo el tiempo entre dos nombres diferentes, y
además con la imprecisa alusión a un “técnico”.
Evidentemente, esto no estaba nada claro.
El 8 de octubre de 2002, uno de los integrantes
de la Comisión Directiva de ASALUP, Max
Seifert, renunció. Es el único miembro
que se fue de ASALUP inmediatamente después de que descubrió
que el comportamiento de Sanz era extremadamente sospechoso.
Seifert pedía pruebas y evidencia (¿Dónde
está el documento? ¿Por qué Sanz firmó
un artículo como si él lo hubiera escrito? ¿Dónde
está la evidencia de que Edefex existe?), mientras que
el resto de los miembros de ASALUP invertían la
carga de la prueba: le pedían a Seifert que probara que
Sanz estaba equivocado. Sanz era el (supuesto) autor
del artículo, el que había citado una (inexistente)
compañía, y el que había recibido el fax.
EDEFEX PODRÍA SER EDEFX
El 10 de octubre de 2002, un miembro de la lista “Incrédulos”,
Carlos "Barto" Álvarez,
envió un e-mail privado al vicepresidente de ASALUP, Norberto
Maraschi, en el cual le decía que el nombre correcto
de la compañía podría ser Edefx (sin la “e”).
Esta era la primera vez que se mencionaba el nombre de
una compañía real, once meses después de
que se publicara el artículo en la página web de
ASALUP. En realidad había una empresa llamada
Edefx Group, pero no podíamos saber si se trataba de un
error o no. Cuatro días después, el 14 de octubre
de 2002, Álvarez envió otro e-mail, esta vez a la
lista “Incrédulos”, diciendo que la compañía
era Edefx y que había sido adquirida por el Miami Broadcasting
Group (en realidad el nombre correcto es Miami Broadcast Center).
Y este hecho provocó que Sanz y el resto de los miembros
de ASALUP comenzaran a hablar de Edefx en lugar de Edefex. De
esta manera era fácil para Sanz buscar el nombre
en internet y obtener todos los datos de la compañía
(8). La pregunta es: ¿cómo pudo recibir un fax con
el logotipo de Edefex en noviembre de 2001, cuando él se
enteró de los verdaderos datos de la compañía
en octubre de 2002? Parece que hay dos opciones: o recibió
un fax falso, o lo inventó él.
LA "MATERIALIZACIÓN" DEL
FAX
El 15 de octubre de 2002 Sanz mostró el fax a los miembros
de ASALUP. ¿Dónde y cuándo encontró
el fax? Sanz nunca contestó a esta pregunta. El
fax fue publicado en la página de ASALUP el 12 de noviembre
de 2002 (recuérdese esta fecha) como la “evidencia” de
la existencia de Edefex.
Echemos un vistazo a la “evidencia” (ver el análisis
del "fax" en la
infografía
animada):
1) La nota, en sí misma, no tiene
fecha (salvo la del fax)
2) Abajo del logotipo, hay una dirección: 7355 NW 41 St.,
Miami, Fort Lauderdale, 33166. TE. 305-593-9785. ¿Es en
Miami o en Fort Lauderdale? No hay dos ciudades con el
mismo código postal. En los EE.UU., la abreviatura
usual para “teléfono” es “Tel.”, “Phone” o “Ph.”. ¿Alguna
vez vieron “TE.”? De hecho, TE. es la abreviatura argentina (pertenecía
a Teléfonos del Estado, la vieja compañía
estatal de teléfonos en la Argentina). Esto sugiere
un autor argentino.
3) El logotipo dice “The EDEFeX Group”, pero la verdadera empresa
era Edefx Group. Entonces dieron una extrañísima
“explicación” afirmando que esta diferencia se
debía a una razón fonética: se había
modificado el nombre para que la población latinoamericana
pudiera comprender y pronunciar el nombre correctamente (?)
4) La imagen escaneada es cuadrada. Es una forma extraña
para una hoja de papel. Podría ser hoja tipo A4, carta,
u oficio. La mayoría de las notas tienen una línea
en la parte inferior de la hoja, mostrando los datos: dirección,
teléfono, e-mail, etc. Aquí no se muestra.
¿Por qué?
5) El fax, que supuestamente provenía de México,
fue recibido por Sanz justo una o dos horas antes de su
supuesta aparición en el programa de TV.
6) No hay manera de ubicar al hombre que supuestamente le envió
el fax a Sanz (que presuntamente puede ser Hugo Giménez
Moreno o Arturo Lugo). De todos modos nadie pudo entrar
en contacto con Arturo Lugo, quien supuestamente le dio
a Sanz autorización para reproducir fragmentos de su artículo.
7) De acuerdo al número impreso por la máquina que
recibió el fax, éste fue enviado desde el número
de teléfono 52 (código de país de México)
5 2117533. Este número pertenece a una empresa llamada
Televinet, y no tiene nada que ver con Arturo Lugo. En Televinet
no saben nada de César Buenrostro (co-autor del artículo
plagiado) ni tampoco de Hugo Giménez Moreno.
Hay algo aquí que es necesario aclarar. En
el punto 5) digo que Sanz recibió el fax justo
antes de su supuesta aparición en un programa
de televisión, porque hasta ese momento Sanz había
dicho que había recibido el fax el mismo día en
que se presentó a debatir con Fazio en TV -aunque
en otro e-mail (ver más arriba) dijo que había recibido
el fax y que al día siguiente lo había mostrado
por TV. Bien, el 13 de noviembre de 2002, el vicepresidente Maraschi
envió un e-mail a “Incrédulos” contestándole
a Pedro L. Gómez Barrondo,
editor del boletín electrónico El
Escéptico Digital, sobre la fecha exacta del
debate televisivo con Fazio. Escribió:
“El debate fue el 19 de noviembre de 2001 a las
17 horas, el mismo día de recibido este fax...”
Como se puede observar, la fecha del fax es “19
de noviembre de 2001”, de manera que uno podría esperar
que el debate se hubiera efectuado el mismo día, como Sanz
y Maraschi habían dicho. O al día siguiente, como
también había escrito Sanz. Esto no es cierto.
Grande fue mi sorpresa cuando conseguí una copia del debate
con Fazio. No fue el 19 sino el 16 de noviembre de 2001,
¡tres días antes de la fecha en que Sanz y Maraschi
afirmaban que se había recibido el fax! Y, por
supuesto, Sanz no mostró nada por TV simplemente porque
el fax no podría haber existido ese día (9).
SANZ RENUNCIA A ASALUP
Cuando los miembros de ASALUP se dieron cuenta de los “errores”
que contenía el fax, no tuvieron alternativa:
a Sanz le pidieron la renuncia a la presidencia de ASALUP. Pero
todos estos “errores” fueron descubiertos por Seifert, por Agostinelli
y por mí en un par de horas. A pesar de que tuvieron
la “evidencia” veintiocho días delante de sus ojos, ¡no
encontraron nada! Debemos recordar que Sanz mostró
el fax a los miembros de ASALUP el 15 de octubre y lo publicaron
en la página el 12 de noviembre.
Inmediatamente nos dimos cuenta de que el fax era
falso. Una de las excusas que nos dieron fue “somos escépticos,
no detectives”. Más todavía, entramos en contacto
con Jamee Houk (no "James Houk"
como aparece en el fax), quien había trabajado en Edefx
Group. Ella nos dijo que no tenía nada que ver con esa
nota, y que la firma que aparece en el fax no le pertenece. La
primera persona que nos habló de Jamee Houk fue Arturo
Marín, un productor mexicano fácilmente accesible
en Internet. Marín nos envió el verdadero logotipo
de Edefx, papelería de la empresa y -lo que es más
importante- la tarjeta personal de Jamee Houk, ex Directiva de
Edefx Group. Marín nos explicó que EDEFX
era el acrónimo de “Edit, Design, Effects” (Edición,
Diseño, Efectos) con lo cual queda claro que la “e” minúscula
insertada en el logotipo mostrado por Sanz no tenía sentido.
También ubicamos al hombre que había sido
presidente de Edefx Group, Marcos Obadia,
y nos confirmó que el logotipo y la carta contenida en
el fax no se correspondían con el verdadero logotipo usado
por Edefx (véase el verdadero logotipo en la infografía
animada).
Paso a paso, estábamos haciendo lo que debería
haber sido hecho por los miembros de ASALUP. Se supone que eran
ellos quienes tenían que investigar el caso, ya que el
sospechado era su propio presidente.
LA RESPUESTA "INSTITUCIONAL" DE
ASALUP
La respuesta “institucional” de ASALUP consistió en un
“comunicado oficial” (enviado por e-mail a la lista “Incrédulos”)
en el cual los miembros de ASALUP expresaban su decisión
de terminar con la investigación. Agostinelli
y yo fuimos declarados “persona no grata”.
Una vez que “terminaron” con esta papa caliente, continuaron organizando
conferencias. El conferencista era... el propio Sanz.
(Recuérdese que los propios miembros de ASALUP le pidieron
la renuncia). ASALUP volvió a poner on-line el
artículo cuestionado, quitando el nombre de Edefex y citando
una “autorización” que obtuvieron de César Buenrostro
después de este episodio. La supuesta primera
y válida autorización de Arturo Lugo nunca se mostró
y ni Sanz ni ningún miembro de ASALUP presentó prueba
alguna de su existencia.
EN NOMBRE DEL "ESCEPTICISMO"
En nombre de la lucha contra la pseudociencia, el presidente de
ASALUP (ahora ex presidente) y sus miembros usaron, e
incluso apoyaron, métodos típicamente utilizados
por pseudocientíficos. Pienso que este es el peor
“favor” que una organización escéptica puede hacerle
al escepticismo. Más aún, cuando se hicieron
críticas, en lugar de analizar la evidencia, la ocultaron.
Lejos de expulsar inmediatamente a un miembro que había
plagiado artículos y citado fuentes falsas, trataron
de cubrirlo todo lo que pudieron.
Tres de los miembros que denunciaron a Sanz y a
ASALUP fueron censurados y “moderados” en la lista “Incrédulos”,
y dos de ellos, Agostinelli y Seifert, fueron expulsados por el
administrador de la lista, Sebastián Bassi.
Algunos Miembros Consultores de ASALUP renunciaron después
de que fueron notificados de este episodio, y hasta hace unos
meses, ASALUP tenía a Carl
Sagan como Miembro de Honor a pesar de que
Sagan murió en 1996 y ASALUP ¡se fundó en
2001! Los objetivos de ASALUP fueron literalmente copiados
de los del CAIRP. La única diferencia es que no se cumplieron.
Esta situación caótica llevó a la
renuncia del vicepresidente Maraschi, Germán Buela y Orlando
Liguori.
Un breve vistazo del episodio deja el siguiente
saldo:
- Dos artículos plagiados
- La cita de una empresa inexistente. Sanz dio por lo menos tres
direcciones y ciudades diferentes para Edefex (12),
- Una promesa, nunca cumplida, de aclarar el “error” (13),
- Se presentó como “evidencia” un fax falso,
- Una supuesta presentación del fax en TV que nunca tuvo
lugar,
- Se dieron fechas contradictorias de la emisión del debate,
- Se ocultó la evidencia y los hechos: el “fax” se publicó
en la página web 28 días después de que Sanz
lo “encontró”. (Los miembros de ASALUP minimizaron la cuestión
del plagio diciendo que Sanz se “olvidó” de mencionar las
fuentes y los verdaderos autores del artículo OVNI. Varios
miembros de ASALUP apoyaron las afirmaciones de Sanz sin chequear
los datos).
- Se removió el artículo plagiado, y por último,
aunque no menos importante:
- Hubo una gran cantidad de lectores que confiaron en la validez
de este artículo porque apareció en un sitio presuntamente
escéptico.
AGRADECIMIENTOS
Gracias a Alejandro Agostinelli y Max Seifert. Quiero expresar
mi agradecimiento a Luis Alfonso Gámez, Pedro L. Gómez
Barrondo, Julio Arrieta, G. Brasas,
Carlos Domínguez, Martín Fragoso, Arturo Marín,
Jamee Houk, Marcos Obadía y Enrique
Márquez por su apoyo. Gracias a GP Producciones
por proveer los videotapes de los programas de TV.
Primera publicación (en inglés): Skeptical
Briefs, Ed. CSICOP, Vol. 13, Nº 1, March 2003.
The
Enemy Within. Chronology of an Anti-Skpeticism Case in Argentina
Primera publicación (en español): El Escéptico
Digital
Cuando
el Enemigo Está Adentro. Cronología de un Caso de
Anti-Escepticismo en la Argentina
Primera publicación (en portugués):. Ceticismo Aperto
Quando
o inimigo está dentro. Cronologia de um caso de anticeticismo
na Argentina
NOTAS
1. El video del supuesto OVNI está todavía on-line
en el site del Sci
Fi Channel.
2. Sci Fi alienta la discusión en un foro sin hacer ninguna
afirmación sobre la autenticidad del video. Muchos visitantes
se refieren al film como un “aviso comercial” Nadie lo menciona
como un “documental”. Ver, por ejemplo, el
siguiente foro.
3. ASALUP es el acrónimo de Asociación
Argentina de Lucha contra las Pseudociencias
4. S.A. es el acrónimo de Sociedad Anónima, usado
por las empresas comerciales en la Argentina. Es similar al “Inc.”que
se utiliza en USA.
5. Sanz ignoraba que la evidencia del plagio permanecía
en la cache del buscador Google (http://216.239.51.100/search?q=cache:ru1t9JCzSL8C:
xfilesmexico.tripod.com.mx/xfilesmexico/id1.html+Cesar+Buenrostro+ovni&
hl=es&lr=lang_es|lang_it|lang_pt&ie=UTF-8 ).
6. CAIRP es el acrónimo de Centro Argentino para la Investigación
y Refutación de la Pseudociencia. Fue la primera organización
escéptica en la Argentina, y funcionó hasta agosto
de 2001.
7. Agostinelli denunció el plagio de Sanz en un artículo
llamado “Engañados por un… ¿escéptico?” en
el sitio chileno La
Nave de los Locos y en “El
Escéptico Digital”, Edición 2002, N° 08
Diciembre, 2002. Una versión resumida puede verse aquí.
Primero fue publicada como un “comentario” en el sitio de ASALUP,
pero fue eliminada después de presentar el fax falso.
8. Ver www.pixar.com/renderman/artist_tools/whatsrenderman/testimonials.html;
www.maxfilmpro.com/asp/MenuProdResDisplay.asp?Region=FLSO&Category=POSTPROFIL;
y www.gy.com/biz/512110/954.htm
9. La copia me fue proporcionada por GP Producciones, una compañía
productora de TV en Buenos Aires.
10. De hecho, Carl Sagan era Miembro Honorario del CAIRP. Enrique
Márquez, uno de sus ex presidentes tiene la carta original,
firmada por Sagan, aceptando la invitación del CAIRP.
11. El artículo plagiado “El ovni que no fue” fue publicado
por la página La
Nave de los Locos, de Chile, y por el Boletín Electrónico
Español El
Escéptico Digital. Diego Zuñiga
y Pedro Luis Gómez Barrondo, web master del sitio chileno
y editor del boletín español respectivamente, una
vez notificados de estos hechos, colocaron disclaimers y escribieron
artículos explicando la situación, ya que muchos
lectores no estaban advertidos de la situación. Ellos no
recibieron las prometidas aclaraciones de Sanz. Más que
eso, Sanz afirma que ha enviado un e-mail a El Escéptico
Digital en diciembre de 2001, pidiéndole al editor que
desestimara su artículo, pero Gómez Barrondo nunca
lo recibió.
12. Diferentes lugares que dio Sanz de Edefex: Los Angeles, California;
Miami y Fort Lauderdale, Florida; y Naperville, Illinois
13. Sanz también le respondió al investigador Martín
Fragoso (quien le había preguntado sobre Edefex)
que iba a presentar “información contundente” en breve
en TV. Pero esto fue el 5 de diciembre de 2001 . . . diecinueve
días después del debate televisivo, donde no mostró
nada.
|