Para la doctora Ofelia Tapia, de la Universidad Nacional del Centro (UNICEN), "la dieta normal de estos ratones es otra, pero evidentemente ha ocurrido un cambio en este hábito ante la falta de insectos y lombrices". Polop se mantuvo en sus trece: "Es la primera información que nos llega de que los Oxymycterus tengan este tipo de comportamiento alimentario. No teníamos antecedentes científicos en este sentido. Este roedor tiene dientes en forma de cincel y es imposible que con esa dentadura produzca cortes netos en la piel de un animal. El tipo de mordedura es semejante al de cualquier ratón que roe la madera, que jamás podrían confundirse con cortes quirúrgicos", concluyó. Lo cierto es que el ‘hocicudo rojizo’ es solamente uno de los predadores citados por el Senasa. Fue la prensa la que lo convirtió en protagonista, casi en un remedo del ‘swamp gas’ ("gas de los pantanos") en los tiempos escépticos del doctor Joseph A. Hynek. Es que el simpático nombre del roedor, con su dentadura mortífera, es una combinación taquillera.

© 2002 Alejandro Agostinelli. (La primera versión de este artículo fue publicada bajo el título "Vague de mutilations animales en Argentine" en la revista VSD Hors Série N° 5, Octubre 2002, pp. 56-61. Ed. GS Presse Communication, Cedex, Francia.)

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