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La Iglesia Católica, responsable de sonados escándalos sexuales, financieros y demás, pretende contar con varios centenares de millones de fieles quienes, en su mayor parte, no concuerdan con las posiciones de la Iglesia. Esta introducción sin ambigüedades es reafirmada por un comunicado transmitido a la prensa: "se trate del divorcio, la contracepción, el aborto, la homosexualidad, etc.; la enorme mayoría de los pretendidos católicos no respetan en absoluto los edictos del Papa al respecto". Incluso entre los millares de jóvenes católicos que vinieron a venerar al Papa a Toronto en julio de 2002, hubo muchos que se decían en desacuerdo con su líder acerca de numerosas cuestiones fundamentales. En una encuesta publicada durante la visita del Papa, se comprueba además que los jóvenes de Quebec, por ejemplo, son en gran medida totalmente opositores a a las posiciones tradicionales de la Iglesia Católica, fundamentalmente en las cuestiones que tocan a la sexualidad. OBJETIVO: APOSTASÍA Según los raelianos, para que cada quien exprese propia oposición a las prácticas de la Iglesia católica está por salir, aparentemente por escrito, lo que se llama en lenguaje poco popular "la apostasía" ("renegar de la fe cristiana" según el diccionario). Esta determinación por parte de cada persona que quiera salir oficialmente de la iglesia católica evitaría que se la cuente entre los miembros de tal Iglesia. Los miembros del Movimiento Raëliano Internacional van a bajar a las calles del mundo entero para lanzar una campaña de incitación a la apostasía, proveyendo formularios muy fáciles de enviar a los obispos de la región donde los católicos hayan sido bautizados. Por supuesto, ya han comenzado a hacerlo en Montreal lanzando indirectamente su campaña por la apostasía durante el desfile del Orgullo Gay. Los raelianos, que desde sus comienzos encontraron apoyo en la comunidad gay, tenían su carroza en este desfile, sin embargo bastante menos vistosa que aquella que le precedía, sobre la cual se hallaba una mujer crucificada con los senos generosamente desnudos que denunciaba la condena de la homosexualidad por la Iglesia Católica. Los 200 raelianos presentes en el desfile habrían distribuido una decena de millares de folletos invitando a apostasiar, lo que 500 personas, según el MRI, hicieron ahí mismo. Estas apostasías proximamente serán remitidas al obispado de Montreal. Para el MRI "apostasiar no es renegar de Jesús ni de su mensaje, solamente de una organización que ha traicionado sus mensajes de amor y justicia y continúa haciéndolo". Se estima actualmente que a lo sumo un 10% de la población de Quebec frecuentaría las iglesias católicas porque muchos no se sentirían más católicos o habrían abandonado la práctica religiosa. "Pero como hace tanto tiempo que usted no ha apostasiado oficialmente por escrito, ¡la iglesia lo cuenta entre sus fieles para aumentar su poder!", sostiene el MRI. "Si Ud. es divorciado (50% de los matrimonios terminan así), si utiliza la contracepción (80% de la población lo hace), si debió recurrir al aborto, si Ud. es homosexual o ha sido víctima de sacerdotes pedófilos, manifieste su oposioción a la iglesia católica que no reconoce sus derechos, apostasiando oficialmente. Apostasiar, es luchar por sus derechos y su libertad de ser diferente". El Movimiento Raëliano Internacional promueve la libertad sexual consentida entre adultos y previene contra la pedofilia, la violación y otros abusos de carácter sexual como "actos criminales morbosos que deben ser inmediatamente denunciados a la justicia, incluyendo a padres y obispos". Si la Iglesia Católica se jacta de contar con centenas de millones de ‘fieles’, el MRI enumera oficialmente para sí "apenas" 55.000 miembros repartidos en 84 países. Sin duda, una cifra modesta comparada con las tropas católicas, pero la adhesión se hace en forma voluntaria. Primera publicación: Bouchard, Alain; "Les raéliens lancent une nouvelle campagne. Catholiques, apostasiez!" en Religion N° 241, Octubre 2002. En http://www.stchristophe.com/rg/rg241/religion.htm Traducido del francés por Rubén O. Morales * Alain Bouchard vive en Canadá y es Psicólogo especializado en sexualidad. Homónimo del sociólogo Alain Bouchard, este es su primer artículo sobre religiones alternativas. BIOGRAFÍAS RELACIONADAS
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